Rene Jaseb Mardöc Jioala

Sé que estas conmigo por amor. No me preocupa que otros hombres te rodeen, cualquiera de ellos me supera en cualidades. Tu vuelves a mí, por amor. De qué te enamoraste si no tengo cualidades?, no lo sé. Prefiero no pensarlo para no ir a romper el hechizo que te amarra a este ser sin atributos. Sólo sé que me amas. Y si el amor se acaba, pues es el amor una sustancia finita, nada quedará en mí, pues nada hay y nada hubo en un principio.

[N. T.: Relidable es otra de las palabras inventadas por R. J. Mardöc, significa que algo puede convertirse en realidad] Imaginen una sociedad donde todos sus integrantes tengan la premisa: " Yo no importo ". El interés individual dejaría de existir y el bien común sería la mayor necesidad. La búsqueda de la felicidad sería la búsqueda del bienestar del otro, y así mismo sería la busqueda del otro mi felicidad. Como indica el sociologo frances [...]. Yo no importo sería un lema anarquista dentro del imperio comercial en el que vivimos, donde la falsa satisfacción personal se vende a 2x1 y se incentiva la "sana" competencia de ser mejor que el otro al tener más, comprar más,  consumir más. El individuo es más débil que el colectivo, y no hay mejor forma de debilitar al colectivo que reforzando la idea, la falsa ilusión de individualidad. Yo no importo . Importa el bienestar de los demás, sin importar cuánto cueste mi sacrificio. La sola idea nos choca, va en co

[R. J. se atribuyó la creación del término moepa. Titulaba asi los escritos que pretendían ser poéticos y profundos, pero que estaban escritos sin siquiera la intención de parecer poemas. En sus largos postulados de filosofía y sisicologia, R. J. cita en muchas ocasiones sus propios moepas.] Es dolorosa pero necesaria la fractura. De otra manera no se reconstruye y fortalecen los tejidos del espíritu. Debe ser la cosa más lacerante el renacer del fenix, pero nada más grato que el volver a ser un feo polluelo.

[R. J. Mardöc solía decir con tono humorístico y falsa modestia que su poesía era arritmica, sin tono ni calidad. Nadie lo dudaba.] No sufre quien no ama Ni ríe Ni llora Ni vive esos momentos de muerte En los que el corazón se detiene Y eres consciente De la ausencia del aire